lunes, 23 de febrero de 2009

La habitacion

bueno aqui les dejo una historia que escribi hace poco, espero les guste y opinen sobre ella, algo me movio finalmente a volver a usar mi blog pero la verdad no se cuanto me duren las ganas asi que espero disfruten de lo que subi, si es que merece ser disfrutado jejeje



LA HABITACION

La oscuridad lo aterraba por sus ojos entre abiertos no veía nada, solo miedo sentía y una brisa recorría la habitación que se mostraba totalmente aislada del mundo sin señal del origen de la brisa que seguía flotando como fantasma, no se hallaban ventanas en aquel sombrío lugar solo una puerta el logro ver ante toda esa oscuridad. El sintió frio a pesar de estar abrigado y la brisa que se colaba en la habitación se hacía más fuerte. Estaba sentado en una cama prisionero de su propio miedo que le evitaba poner sus pies en el suelo, temía el que no hubiera piso, temía bajar sus pies de la cama y caer en una profundidad abismante, después de todo lo único que podía ver con cierta certeza era la puerta que de cierta forma lo invitaba a arriesgarse a bajar de la seguridad silenciosa de su cama y aventurarse frente a una puerta que podía ver pero que desconocía su contenido. Tenía miedo pero aun así se atrevió y bajo lentamente sus pies de la cama sintiendo un piso de madera algo astillado incomodo para sus pies descalzos, parte de su miedo se disipo en el momento que sus pies tocaron el incomodo pero firme piso de madera pero la habitación aun se mostraba oculta en su oscuridad, no dejaba ver sus dimensiones, su altura, nada era toda una jungla de tinieblas la oscuridad se le metía por los ojos llegando a su mente dejando a oscuras sus pensamientos y memorias ya no podía recordar sus amores, sus amigos, sus viajes, sus fantasías, su nombre ya no recordaba nada era otra habitación a oscuras su mente solo que con mas puertas. El único pensamiento que tenía cabida en su mente era el de salir de la habitación pero para que salir, que ganaba con eso ya no entraba en sus pensamientos, solo había cabida para una pequeña luz en su mente “salir de la habitación” movió sus pies uno después del otro primero el izquierdo y seguidamente pero con paso torpe el derecho, sentía como todos sus músculos trabajaban en dicha operación tan sencilla que cualquiera realizaría pero que para él era necesario un esfuerzo mayor, trataba de repetirse en su mente la frecuencia de sus pies, gritaba ¡ izquierda, derecha, izquierda!. Pero era en vano sus gritos no ayudaban a conservar ese sentido lógico en su mente, se tropezaba luego de un serie de movimientos hasta que se esforzaba en levantarse sin saber cómo usar sus brazos, que hasta ese momento ni siquiera había notado que tenia. Sin mayor pensamiento se levanto y siguió avanzando con la misma torpeza que le precedía hasta que llego a la puerta, una puerta que en su mente era el icono más brillante y que ahora tenía en frente pero aun sin saber y ni siquiera pensar que había tras esa puerta. Por un momento sus ojos se iluminaron y se vio miedo en ellos pero uno distinto al que tenía antes, ya no sabía si quería salir de la oscura habitación, sentía en su mente como la única idea, su pequeña luz se consumía de a poco, se arrogó al suelo y puso su oreja en la puerta pero solo para darse cuenta que no había sonido alguno que escuchar, trato de ver, sentir alguna señal o indicio de que había algo tras la puerta que no seria en vano cruzar la puerta trataba de fomentar la pequeña luz en su mente, pero no podía ya se había acostumbrado a ese oscuro lugar, trato de pensar en abrir la puerta, en como abrirla pero su mente oscurecida no encontró solución, ya no recordaba sus brazos y como los había usado anterior mente ya no había remedio se dio cuenta de que era mejor permanecer en ese oscuro pero tranquilo lugar, su miedo ya no estaba y su mente ya oscura por completo lo hiso quedarse rígido y sus ojos se cerraron lentamente, su respiración disminuyo. Cayó en un profundo sueño del que creía no despertaría, lo último que logro pensar antes de caer dormido fue en no perder su oscura habitación.
Sintió que su respiración incrementaba, su corazón latía mas fuerte y sus ojos se habrían abruptamente recordando su nombre, sus amores, sus fantasías, todo lo perdido en su mente. Miro sus brazos, luego sus manos prosiguiendo por sus dedos, supo cómo funcionaban, las muchas combinaciones de movimientos que ya podía hacer, en su mente clara podía retener ideas, estaba atónito de alegría al ver que había recuperado lo que había perdido, pero no se percato que había perdido algo mas, su deseo de permanecer en la habitación, solo que ahora vio que permanecía en ella aun, sin mayor preocupación bajo sus pies, que inmediatamente tocaron el suelo aun rasposos y comenzó a caminar sin ninguna dificultad hasta estirar su mano y tocar la perilla de la puerta que lo sacaría de ahí, pero al estirar su mano sintió una pared lisa, ya no había puerta en donde antes hubo una, miro a su alrededor y todo lo demás seguía igual era la misma habitación, solo dos cosas habían cambiado, ahora lo que más quería era abandonar esa oscura habitación y la única puerta del lugar se había ido resentida.